Guía para elegir carteras de criptomonedas seguras

Las carteras de criptomonedas son, a menudo, el lugar donde comienzan las actividades para muchos usuarios. Elegir una cartera de criptomonedas privada adecuada es importante, pues debería ser un refugio seguro para tus activos digitales. Pero ¿cómo puedes estar seguro de que tus fondos están almacenados en un lugar verdaderamente seguro? ¿Cómo abordan la seguridad los diferentes tipos de carteras? Mantente en contacto para averiguarlo...

¿Por qué son importantes las claves privadas?

De hecho, los activos digitales no se almacenan en las carteras de criptomonedas. En su lugar, estas te dan acceso a las criptomonedas en una cadena de bloques con la ayuda de claves privadas. Tus fondos están seguros siempre que tu clave privada lo esté (imagínatela como una contraseña que desbloquea tu caja fuerte privada en un banco). La cuestión sigue siendo ¿cómo tratan las carteras de criptomonedas las claves privadas? ¿Qué beneficios y riesgos tienen?

La seguridad en diferentes carteras de criptomonedas

Si usas una cartera sin custodia, eres el único poseedor de tus claves privadas, frases semilla y otras contraseñas que determinan la seguridad de tus fondos. La responsabilidad es tuya, no hay ningún nivel adicional de seguridad entre tú y la cadena de bloques que usas. Asimismo, no existe la opción "¿has olvidado la contraseña?" que permite volver a iniciar sesión. Concretamente, algunos expertos estiman que más o menos una quinta parte de los activos digitales se pierde debido al olvido de las contraseñas.

En carteras sin custodia, tú decides donde y cómo almacenar tus claves privadas. Por un lado, esto podría parecer la solución perfecta a todos los problemas; por el otro, en realidad no lo es tanto después de todo. Encontrar un lugar seguro para guardar las claves privadas puede ser una tarea bastante tediosa que hace que los fondos sean más vulnerables a los ataques o incluso al robo. Recuerda que la responsabilidad siempre recae en ti. Si tu clave privada está comprometida, tienes las mismas probabilidades de perder fondos tanto si tienes una cartera caliente como una fría.

Por otra parte, las carteras con custodia se ocupan de las claves privadas por ti. El peso de la responsabilidad deja de recaer en tus hombros. Las carteras con custodia, que conforman el servicio que conecta el usuario y la cadena de bloques, emprenden acciones adicionales para proteger tus fondos. Una de las más eficaces es la autenticación de dos factores 2FA. Consiste en generar un código de 6 dígitos exclusivo que cambia cada 60 segundos y que solo tú conoces. Algunas carteras, como la NC Wallet, permiten también que los usuarios por sí solos bloqueen direcciones IP no deseadas y fijen límites para las operaciones de retirada y cambio de cualquier moneda o de todas ellas.

Además, aunque una cartera con custodia esté comprometida, los hackers no podrán acceder a más fondos que los guardados en la cartera caliente del proveedor. Los fondos del resto de los usuarios están protegidos por una cartera fría o una cadena de ellas. Por consiguiente, no es necesario que te preocupes de buscar por ti mismo modos de seguridad adicionales.

Tú eliges: usar servicios con un sistema de seguridad preestablecido o asumir tú mismo la responsabilidad del almacenamiento de las claves privadas.